Por: Daniel Fernández Pale
La educación en la actualidad ya no es tan rígida como antes, se pueden ocupar los distintos modelos educativos dependiendo de las necesidades de aprendizaje y de los intereses de nuestros alumnos.
Cada modelo tiene algo bueno que aportar a la educación, (nosotros somos el resultado de los modelos anteriores) el profesor debe echar mano de todas las herramientas posibles para impartir su clase y no casarse con un modelo en particular.
Recordemos que el alumno aprende lo que él quiere aprender, lo que le es necesario, útil, o más interesante, el profesor debe aprovechar ese interés y estimularlo.
Ahora la tarea del docente va más allá, debemos sembrar dudas en el alumno, crear interés en el aprendizaje, para que la enseñanza le sea significativa y la pueda comprender y asimilar.
En relación a la Reforma Integral para la Educación Básica (RIEB) que en nuestro país se está manejando la concepción de aprendizaje que me parece más congruente con el enfoque por competencias es la concepción Socio- constructivismo basado en las ideas de Vigotski; esto sin dejar de utilizar los demás modelos de aprendizaje.
El Socio-constructivismo da importancia a la interacción social, a la zona de desarrollo próximo, ha el aprendizaje colaborativo y al aprendizaje situado, tomando en cuenta al contexto en donde se desenvuelven los alumnos y al lenguaje como instrumento mediador de comunicación entre expertos e iguales.
El aprendizaje se da a partir de la interacción entre alumno-alumno, profesor-alumno, tomando en cuenta las capacidades reales del estudiante, y utilizando los viejos saberes para construir los nuevos saberes se va construyendo el conocimiento.
Toma en cuenta los intereses propios del alumno, su forma de entender lo que le rodea, porque cada quien lo interpreta de forma diferente y construye y reconstruye su sus saberes a partir de sus conocimientos previos.
El aprendizaje significa “aprender con todos” en verdad creo que esta frase resume lo que es el socio-constructivismo, ya que todos aprendemos de todos en nuestro caminar por la vida.
El aprendizaje de ninguna manera es algo trivial, va más allá de unas simples preguntas, para Moreno López el aprendizaje es un proceso de descubrimiento de significados personales sobre la realidad que percibe, tal como es percibida por la persona (1).
Cada uno de nosotros ve al mundo de diferente forma, aprendemos de modos diversos, la teoría de inteligencias Múltiples de Howard Gardner (1983) sobre el tema comenta que algunos somos auditivos (aprendemos escuchando), otros visuales (viendo), otros realizando las actividades (de forma cinestesia) etc.
Un maestro al observar y medir el conocimiento de sus estudiantes a través de unas simples preguntas, no podría alcanzar a evaluar el aprendizaje de sus alumnos, por lo que debe utilizar los deferentes métodos de evaluación que estén a su alcance.
Hay que considerar a la evaluación como un proceso dinámico, abierto y contextualizado que se desarrolla a lo largo de un período de tiempo; no es una acción puntual o aislada. En segundo lugar, se han de cumplir varios pasos sucesivos durante dicho proceso para que se puedan dar las tres características esenciales e irrenunciables de lora la evaluación (2):
1. Obtener información: Aplicación de procedimientos básicos y fiables para conseguir datos e información sistemática, rigurosa, relevante y apropiada que fundamente la consistencia y seguridad de los resultados de la evaluación.
2. Formular juicios de valor: los datos obtenidos deben permitir fundamentar el análisis y valoración de los hechos que se pretenden evaluar, para que se pueda formular un juicio de valor lo más ajustado posible.
3. Tomar decisiones: de acuerdo con las valoraciones emitidas sobre la relevante información disponible se podrán tomar las decisiones que convenga en cada caso.
Para que el profesor pueda identificar con claridad donde requieren sus estudiantes más estimulación y de qué tipo, es necesario realizar una evaluación continua.
Recordemos que la evaluación no nada más es para los estudiantes, sino más bien es para los profesores responsables de incentivar el aprendizaje de sus alumnos.
1.- Moreno López, Salvador (1997) “La experiencia interna del maestro: un aspecto descuidado en la formación de profesores universitarios” en Desarrollo del potencial humano V.4., Lafarga Corona, Juan & Gómez del Campo, José Trillas, México, pág. 107.
2.- De Wikipedia, la enciclopedia ibrehttp://es.wikipedia.org/wiki/Evaluaci%C3%B3n_psicopedag%C3%B3gica
